jueves, 2 de agosto de 2007

Chapas de campaña (1)


Explicaba Norman Mailer en Miami y el sitio de Chicago (1970) que es más interesante observar lo que rodea a un gran político que hablar con él. Tenía razón, algo no muy habitual en Mailer. Aquí va una muestra de la publicidad nixoniana.

2 comentarios:

Manuel Arias Maldonado dijo...

Hungría! Gran país. Me produce cierta fascinación estética, completamente sin fundamento. Quizá se debe al hecho de que un gran Imperio haya terminado siendo apenas una gran selección de waterpolo: de Sissí a las piscinas.

Por otro lado, Mailer es un plasta, como todos sabemos.

elpablo dijo...

el fútbol tiene una deuda pendiente con hungría. dudo que jamás se la cobren. una pena.